POESÍA EN LAS AULAS 15

Proyecto sobre la Edad Media

Comienzo del Poema o Cantar de Mío Cid. Esta composición es probablemente el poema épico más importante de la literatura castellana medieval. Fue escrito hacia 1140 por un juglar, del que no se conoce el nombre, de Medinaceli o San Esteban de Gormaz (Soria). La Biblioteca Nacional atribuye el manuscrito a Per Abbat. El poema narra el destierro que sufrió Rodrigo Díaz, el Cid, nacido en Vivar (Burgos) en 1043 y fallecido en Valencia en 1099.

 

 

POEMA DE MÍO CID

I

LOS OJOS DE MIO CID – TAN FUERTEMENTE LLORANDO;

HACIA ATRÁS VUELVE LA VISTA – Y SE QUEDABA MIRÁNDOLOS

VIÓ CÓMO ESTABAN LAS PUERTAS – ABIERTAS Y SIN CANDADOS,

VACÍAS QUEDAN LAS PERCHAS – YA SIN PIELES Y SIN MANTOS,

SIN HALCONES DE CAZAR – Y SIN AZORES MUDADOS.

SUSPIRA EL CID PORQUE VA – DE PESADUMBRE CARGADO.

Y HABLÓ, COMO SIEMPRE HABLA, - TAN JUSTO Y TAN MESURADO:

“¡BENDITO SEAS, DIOS MÍO, - PADRE QUE ESTÁS EN LO ALTO!

CONTRA MÍ TRAMARON ESTO – MIS ENEMIGOS MALVADOS”

III

(El Cid entra en Burgos)

YA POR LA CIUDAD DE BURGOS – EL CID RUY DÍAZ ENTRÓ.

SESENTA PENDONES LLEVA – DETRÁS EL CAMPEADOR.

TODOS SALÍAN A VERLE, - NIÑO, MUJER Y VARÓN,

A LAS VENTANAS DE BURGOS – MUCHA GENTE SE ASOMÓ.

¡CUÁNTOS OJOS QUE LLORABAN – DE GRANDE QUE ERA EL DOLOR!

Y DE LOS LABIOS DE TODOS – SALE LA MISMA RAZÓN:

“¡OH DIOS QUÉ BUEN VASALLO – SI TUVIESE BUEN SEÑOR!”

El texto original se puede encontrar en la documentación del centro virtual Cervantes:   Cervantes Virtual 

Estatua ecuestre en Burgos